TOV: ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL PARA LA DIFUSIÓN DE NUESTROS VALORES
BAJO LA DIRECCIÓN DEL RAB YOSEF YAGENEste número contiene:
| La Felicidad depende de tus Pensamientos |
LA FELICIDAD DEPENDE DE TUS PENSAMIENTOS Basado en el libro “Gateway to Happinness” del Rab Zelig Pliskin.Es imposible definir qué es la felicidad, pues ser o estar feliz es un estado emocional, lo cual es una experiencia, no un concepto. Las emociones se componen de estados psicológicos y de diversas cogniciones y sólo una persona que las ha experimentado puede saber lo que son .
Una definición de felicidad del Webster´s New Collegiate Dictionary es: “Un estado de bienestar y satisfacción”.Si hacemos todo con entusiasmo, podemos lograr grandes niveles en lo que realicemos.
La felicidad puede curar a una persona de la enfermedad (Comentario de Rabenu Yoná a Mishlé 17:22). Una disposición alegre es un tesoro inestimable. Conserva la salud, ayuda en la convalecencia, y nos ayuda a lidiar con la adversidad (From the Wisdom of Mishle, p. 220).
La falta de felicidad es muy dañina para nuestra salud. Un amplio rango de enfermedades psicosomáticas son causadas por emociones no deseadas, tales como preocupación, envidia, enojo y ansiedad excesiva.
¿Cómo obtenemos la felicidad?
Una persona realmente feliz no permite que su felicidad sea dependiente de factores externos sobre los que no se tiene control (Jojmá Umusar, vol. 2, p. 331-2).
Alguien que basa su felicidad en la riqueza, la fama, el éxito u otros factores externos, no podrá ser responsable de su felicidad. Sólo dominando una actitud positiva hacia la vida y sus diversas situaciones podemos volvernos responsables por nuestras emociones y nuestra felicidad.
Por otro lado, debemos saber cómo enfrentar los momentos de tristeza e infelicidad. Si sólo queremos tener en todo momento felicidad a pesar de todo, se puede tratar de obtener por medios que causen a otros dolor, sufrimiento, o daño a nosotros mismos y nuestra persona (satisfacción inmediata pero con consecuencias negativas).
Esperar la perfección es irracional y contraproducente. Si esperamos sentirnos felices en todo momento, comenzamos a sentirnos ansiosos cuando no nos sentimos felices. Un control total sobre las emociones es una meta irreal. Pero todos podemos mejorar y adquirir el hábito de pensar de manera positiva, y así nuestro estado de ánimo en general irá mejorando.
Tú creas tu mundo emocional.
Rab Simja Wasserman dice: “La vida es simple, la gente es compleja”. La vida tiene el potencial para la felicidad, pero cada persona escoge lo que va a pensar y como va a ver las cosas.
La felicidad es una habilidad que puede ser aprendida. Para adquirir esta habilidad es necesario manejar:
- La capacidad de enfocarse en pensamientos que nos produzcan felicidad, en vez de aquellos que nos produzcan infelicidad.
- La habilidad para evaluar eventos y situaciones como positivos en vez de negativos, o por lo menos, reducir el nivel de negatividad (en vez de interpretar las molestias menores como tragedias, evaluarlas como menores).
La vida de una persona que tiene una actitud positiva ante todo lo que ocurre, la compara el rey Shelomó con una vida de fiestas constantes (Mishlé 15:15). Su vida entera está llena de alegría. Esta persona no requiere situaciones especiales para proveerlo de alegría. En cualquier cosa que haga y donde quiera que esté, encuentra motivos para estar alegre. Cada experiencia le proporciona un crecimiento constante y aprende de cada persona con la que está en contacto.
Dominar esta actitud requiere tiempo y esfuerzo, pero es una inversión que vale la pena.
En gran medida, nosotros creamos el mundo en que vivimos.
Es cierto que hay muchos eventos fuera de nuestro control en los cuales no podemos tener una influencia directa, pero aun así tenemos la capacidad de controlar nuestras actitudes en relación con una situación establecida. Es por ello que las consecuencias emocionales de los eventos dependen de nosotros en gran medida.
Es irreal esperar tener un control perfecto sobre nuestras emociones, pero cualquiera que trabaje de manera calmada y persistente en sus pensamientos es capaz de mejorar.
Una fórmula concisa para mejorar puede ser propuesta de manera muy simple:
Constantemente haz un esfuerzo por concentrarte en pensamientos que produzcan felicidad y vas a estar feliz.
La mente constantemente trabaja con diversas cogniciones e imágenes en el centro de nuestra atención. La mayoría de las personas no están completamente conscientes de lo que se están diciendo constantemente a sí mismos, pero cobrando consciencia de estos pensamientos pueden tener un mayor control.
Si realizas un esfuerzo por decirte a ti mismo afirmaciones que conduzcan a la felicidad, puedes llevar una vida feliz.
Mucha gente deja su mente tan fuera de control que todo lo que piensan está manejado completamente al azar, de una forma desordenada. Cualquier pensamiento que entra a la cabeza ocupa un lugar muy importante junto con los pensamientos más elevados.
La persona tiene que trabajar en tener una mente ordenada y decidir cuales pensamientos son en los que va a elegir pensar.
La habilidad para decidir lo que permitimos entrar a nuestra mente necesita ser aprendida y requiere de mucha práctica. No puede ser adquirida en un día, un largo periodo de tiempo es necesario.
Es muy importante no forzarse a sí mismo, pues las consecuencias pueden ser lo contrario de lo que esperamos. Hay que abordar nuestro objetivo de manera calmada y ser flexibles.
Debemos comenzar a trabajar en dominar nuestros pensamientos por poco tiempo cada vez y continuar agregando un poco progresivamente. Una sugerencia es comenzar a pensar en algún tema específico por cinco minutos sin dejar otros pensamientos entrar en nuestra mente.
Nosotros elegimos constantemente en que concentrar nuestra atención, ya sea en lo positivo como en lo negativo.
La felicidad puede ser aprendida. Es probable que nunca tengamos un control completo sobre nuestras emociones, pero tenemos más control sobre ellas de lo que creemos. Nuestros pensamientos controlan nuestras emociones y podemos controlar nuestros pensamientos hasta un grado muy alto.
Nosotros mismos elegimos pensar aquellos pensamientos que nos hacen felices o lo contrario.
Dejar entrar a la mente cuanto pensamiento se nos presente es también una elección. Esta elección implica basar nuestra felicidad en reacciones automáticas en vez de activamente tomar la iniciativa de pensar en aquellos pensamientos más beneficiosos.
Tenemos el potencial para usar nuestra mente para enfocarla en aquellos temas que nos produzcan alegría y tranquilidad.
Constantemente estamos repitiéndonos mensajes dentro de nuestra mente. Si son negativos: “soy un fracaso”, “el mundo es horrible”, “nada está bien”, etc. hacemos nuestra vida miserable. En vez de eso podemos hacer un esfuerzo por repetir conscientemente mensajes positivos: “tengo la habilidad para continuar mejorando”, “el mundo está lleno de oportunidades maravillosas”, todo lo que me pasa puedo utilizarlo para crecer”. Rabbí Yisrael Salanter enfatizaba la importancia de memorizar aforismos y pasajes inspiradores y repetirlos constantemente. Poco a poco éstos irán teniendo un efecto positivo dentro de nuestra personalidad y nuestras emociones (ver Tnuat Hamusar vol. 1, pp252-5).
Tenemos la capacidad de controlar nuestros pensamientos. Aun si éstos son vagos y se nos van hacia cualquier parte, podemos traerlos de regreso y enfocarlos hacia lo que deseemos.
No podemos pensar en dos pensamientos a la vez. Por ello, cuando un pensamiento negativo emerge, no necesitamos combatirlo. Podemos hacer un esfuerzo por pensar en un pensamiento positivo y así los pensamientos negativos desaparecerán.
Hablamos constantemente con nosotros mismos. Podemos elegir ser nuestros mejores amigos diciéndonos a nosotros mismos pensamientos positivos.
Hay una historia acerca de un trabajador que siempre llevaba a su trabajo sandwiches de mermelada. Un compañero de trabajo lo escuchó decir: “Oh no, es un sandwich de mermelada otra vez, odio la mermelada”. El compañero de trabajo le preguntó: ¿Por qué no le dices a tu esposa que te haga un sandwich de otra cosa? El trabajador respondió: “Mi esposa no prepara mis sandwiches, los hago yo mismo”.
Una persona que se hace la vida miserable por repetirse pensamientos negativos está actuando de una manera tan tonta como este trabajador.
La persona cuya atención está constantemente en lo malo de él mismo y del mundo que lo rodea, o por lo que puede estar mal en el futuro, no está pensando de manera positiva. Si esto pasa, podemos ponerle un alto a los pensamientos que nos producen tristeza o ansiedad y pensar en otra cosa más positiva.
Tu actitud es un factor clave para tus reacciones.
Lo que te dices a ti mismo acerca de una situación dada es la forma en que esta situación te va a afectar. La actitud con respecto a cualquier evento o situación no está basada en la realidad objetiva, sino en tu evaluación subjetiva de ese evento o situación.
Los eventos y situaciones a un nivel objetivo simplemente ocurren. Es el observador quien los evalúa, ya sea como positivos, negativos o neutrales.
Las reacciones emocionales se basan en esta evaluación subjetiva. No se tienen reacciones emocionales a los hechos en sí, sino a esas evaluaciones subjetivas que realizamos:
- Cuando evalúas algo como negativo, terrible, trágico o desafortunado, te sientes triste, miserable, enojado o lleno de ansiedad.
- Cuando sientes que algo no te afecta de ninguna manera, te sientes neutral e indiferente.
- Cuando evalúas algo como bueno para ti, reaccionas con alegría.
Para ilustrar cómo las reacciones emocionales responden a nuestra evaluación, podemos preguntarle a alguna persona cómo reacciona normalmente a los insultos. La mayoría de las personas se sienten enojadas o molestas cuando las insultan.
Pero la persona tiene la capacidad de reaccionar de tres maneras distintas.
Si te acercaras a una persona que ofrece un empleo que deseas mucho y ésta te llama tonto o idiota ¿cómo reaccionarías? Lo más probable es que te sintieras molesto o triste.
Sin embargo, si alguien te ofreciera un millón de dólares con la condición que alguien te insultara en las próximas 24 horas, ¿cómo te sentirías si alguien te insulta? Seguramente tu reacción emocional sería de inmensa alegría.
No es lo que alguien te dijo lo que te afecta, sino como tú lo percibes y evalúas.
Aun cuando reaccionemos automáticamente de manera negativa ante una situación, podemos mentalmente cambiar nuestra percepción inicial de la misma y percibirla de una manera más positiva.
Debemos aprender a diferenciar entre hechos, inferencias y juicios de valor. Los hechos no te hacen feliz o triste, es tu propia valoración de ellos lo que ocasiona tus reacciones emocionales.
Otra cuestión que nos hace sentirnos infelices muchas veces es el tener expectativas irreales, tales como:
- Querer que el mundo sea exactamente como nosotros queremos.
- Querer que otras personas actúen exactamente como nosotros deseamos.
- Querer hacer o lograr todo lo que deseamos, a cualquier precio.
Si tenemos este tipo de expectativas, nos exponemos a tener mucha frustración.
Por el contrario, si aceptamos a las personas y a nosotros mismos tal y como somos, nos evitamos el sentirnos decepcionados o enojados cuando las cosas o las personas no funcionan exactamente como esperábamos.
Muchas veces decimos: “me hizo enojar” o “me puso triste”.
Esto implica reconocer los factores externos como causa de nuestras emociones.
La realidad es que los eventos externos no nos hacen felices o enojados. Es lo que nos decimos a nosotros mismos respecto a dichos eventos lo que nos provoca nuestras reacciones emocionales.
Aceptar la responsabilidad por nuestras reacciones, nos puede servir como incentivo para cambiar aquellos pensamientos y actitudes que nos hacen sentir infelices, por aquellos que nos permitan alcanzar la felicidad.
L. K. de C.
Anexo al cassette # 14
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¿Qué más da si el pez tiene escamas o no?
Las escamas les dan protección del medio ambiente y de los predadores. Enciclopedia Británica (CD ’97).
Claro, que no hay que olvidar la cita del Talmud en el tratado de Erubín hoja 21b donde dice que cada Mitsvá de la Torá tiene 3000 motivos y cada Mitsvá de los Jajamim tiene 1005 motivos.
Ya está lista la primera etapa de la audioteca en TOVNET con los dos primeros cassettes.
Ya puedes escuchar on-line (sin tener que esperar que baje el archivo
completo) los primeros cassettes de TOV que se encuentran en TOVNET.
En esta sección, tenemos el gusto de enviar un caluroso Mazal Tov al Rab Yosef Yaguén Shlit”a fundador de la Organización TOV International y a su familia, con motivo de la boda de su hijo Yaacob
hy"v con la Srita. Karen Aharonoff. Sheyizkú Libnot Bait Neemán BeYisrael!Estoy muy preocupada por una tía mía que está bastante mal de salud por problemas personales. Le cuento que lamentablemente en un accidente ocurrido hace algunos años falleció su hija de 27 años. En resumen, lo que me lleva a escribirle es saber qué puedo hacer desde aquí por ella y si hay algo que pueda decirle mediante una carta para que de alguna forma no siga enfermando de tristeza... en fin, el dolor está golpeando muy fuerte y constantemente me dice: "por qué, por qué a ella y no a mí? ¿acaso esa es la justicia de D-os?..." ¿Qué puedo decirle? ¿Cómo ayudarla? ¿Qué puedo hacer?
Le recomiendo, B”H, que le escriba con frecuencia y sobre todo con mucha dedicación y cariño. Que logre ella percibir en sus palabras su interés en ayudarla, en darle apoyo, consejo y sobre todo palabras que hagan aumentar su Emuná (fe y confianza) en Hashem. Procure usted hablarle mucho de Hashem, de lo mucho que quiere a Sus hijos, y que no quiere de ninguna manera verlos sufrir. Que Hashem no manda una prueba (aunque no se las pedimos) a alguien quien no la pueda soportar. Que Hashem sí es justo, pero que no siempre estamos en el nivel de entender Su Justicia. Que de alguna manera entienda el concepto que hay una vida después de esta vida de acuerdo al Judaísmo (y a evidencias científicas), y que en ella está el otorgarle a esa hija que falleció, la posibilidad de escalar niveles mayores cada vez de cercanía a Hashem, por medio de Mitsvot que su tía, sus primas y usted misma hagan para elevar su alma.Explíquele que la separación es física, mas la unión espiritual puede ser mayor cada vez, si ella se propone poner un poco de su parte por salir
adelante, ayudándose y ayudando a su hija a la vez. Después de todo le sobreviven otras dos hijas que también la han de amar y necesitar.Hay una idea que le puede comentar, diciéndole lo siguiente a su tía, cuando ella dice que hubiera preferido fallecer ella y no su hija: "Querida tía, imagínate si la que hubiese fallecido primero fueras tú, y ella hubiera sobrevivido, te imaginas cuanto hubiera ella sufrido por tu ausencia? Valora por favor, con amor, cuanto sufrimiento le evitaste a tu hija..."
Claro, no olvide hacer Tefilá por ella, y si es posible, "recomiéndela" con alguna amiga suya, una Rabbanit u otro familiar en su país, que de preferencia cuiden Mitsvot, de manera que procuren convencerla que tenga una distracción, de ser posible y si tiene tiempo, algo relacionado con algunas mitzvot, (y que las haga leiluy nishmat de su hija) como visitar enfermos, repartir o preparar despensas para gente con carencias económicas, ayudar a parejas a casarse, y claro, primero que nada, procurar que asista a clases de Torá para mujeres. Es probable que en dicho lugar haya grupos de mujeres en esas condiciones que se reúnan para hacer ese tipo de actividades y mejoren su perspectiva hacia la vida y además sus ganas de vivir, y porque no, con la ayuda de Hashem, hasta su estado de salud física.
CLASES Y CONFERENCIAS:
ALGUNOS SERVICIOS QUE OFRECEMOS:
Casetes: diversos temas de interés general (préstamo sin costo alguno y/o venta).
Cocinas Kasher: te ayudamos a Kasherizar tu cocina (servicio gratuito a domicilio).
Orientación y asesoría personalizada: envíanos tus dudas o inquietudes vía fax, e-mail
o correo. Consultas personales previa cita.
Miniseminarios: conferencias de 2 a 3 hrs. para grupos nuevos, solicitándolas con
anticipación.
¡PRÓXIMA CONFERENCIA
DEL DR. BETECH!
Miércoles 17 de febrero
¡Ayuda a alguien a casarse!
(Aunque sea a ti mismo).